Alemán

 

 

 

Niebla Ladrona

volver al index

 

Niebla ladrona

Sigilosamente, sin que nadie lo advierta,
en la ciudad, una ladrona inserta,
a todas las ventanas hace opacar
y los pasos cesan de retumbar.

Morada tras morada hace desaparecer,
además al sol obliga a enceguecer,
a cada árbol se lo mete en su bolsillo
y hasta las estrellas las despoja de su brillo.

De los hombres hace simples sombras,
hurtándoles a todos pues sus caras,
aquellos que aun tenían dirección
ahora no disponen de orientación.

Ojalá que alguien sus manejos pudiera detener,
¡pues incluso al estado le quita el poder!
De sus velos, húmedos, helados, brota un fuerte
escalofriante presentimiento de la muerte.

Cualquiera sólo a sí mismo queda referido,
porque alrededor de sí ya nada es percibido,
así que queda defraudada de la vida,
porque el mundo se encubre en neblina.

 

© Copyright by Peter-Michael Sperlich. Todos los derechos reservados.