volver al index

 


Alemán

 

 

 

 

 

 

Liebeserklärung

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

volver al index

 

 Para Jennifer

Declaración de amor

¿Puedes recordar...

cuando yo era pequeña

y siempre tenía miedo de una tormenta?

¡Cómo me podía sentar sobre tus rodillas

o también subir a tu cama,

porque allí estaba segura!

¡Tú nunca has tenido miedo

del estrépito cavernoso del trueno

y de las llamaradas fantasmales de los relámpagos!

Hoy tienes miedo del silencio,

que nadie busca tu cercanía,

a pesar de que aún vives.

¿Puedes recordar...

cuando yo era pequeña

y tú me ayudaste

a construir mi primer muñeco de nieve?

¿Cómo mis manos congeladas

me punzaban con miles de agujas

y cómo empecé a llorar?

¡Tú tomaste mis manos

entre las tuyas

y las calentaste

hasta que pude entender todo!

Hoy tomo tus manos en las mías

y trato de calentarlas,

pero ellas quedan frías,

porque tú ya has regalado

todo tu calor.

¿Puedes recordar...

cuando yo era pequeña

y tú me cruzaste la calle?

¡Cómo me sujetaste fuertemente

para que yo pudiera llegar con seguridad!

¡En aquel entonces sentí

que sujetar también significa amar!

Hoy te ayudo yo a cruzar la calle,

las pocas veces que tú sales

a respirar aire puro.

¡Y yo te sujeto firmemente!

¿Puedes recordar...

cuando yo era pequeña

y tú todas las noches me leías algo

o me contabas un cuento tuyo?

¡Puedes imaginarte

lo que significaba

dormirse contenta y con tu voz!

Hoy te leo yo

porque tus ojos ya se cansaron

y tus manos no te permiten leer.

Cuando me voy te quedas despierto,

pero yo sé que tú sigues

percibiendo mi voz.

¿Puedes recordar...

cuando estaba creciendo

y muchas veces creía tener un problema?

¡Cómo siempre te llamaba

aun interrumpiéndote en una reunión

con la seguridad de que siempre estabas para mí!

Hoy esperas que alguien,

sólo por un momento,

interrumpa tu soledad.

Sabes que no puedo siempre...

la profesión, los niños, la vida...

¿Puedes recordar...

cuando ya era más grande

y ya no quería más casarme contigo?

Cuando por primera vez me gustaba un chico.

Tú sólo sonreíste,

no dijiste nada.

¡Pero yo sabía que me entendías!

Quizá no puedas

recordar muchas cosas,

pero algo sé muy bien:

¡tú me dejaste ser tu hija

y por ello te amo, padre!

 

© Copyright by Peter-Michael Sperlich. Todos los derechos reservados.